El sector alimentación es unos de los sectores sometidos a las inspecciones de calidad más exhaustivas ya que, ante todo, se exige la seguridad de los consumidores. La tecnología de visión hiperespectral, cada vez más conocida, es la mejor opción para controles de calidad, monitorización y control de los procesos productivos en el sector alimentación
Pero, ¿qué es exactamente la visión hiperespectral?
La visión hiperespectral combina dos tecnologías distintas, una de ellas es la visión artificial, que tal y como hemos contado en otros blogs, consiste en captar imágenes del mundo real, procesarlas y analizarlas para que nos den información adicional. Esta tecnología, en combinación con la espectroscopia de rango infrarrojo, crea mapas tridimensionales, también llamados hipercubos.
De estas tres dimensiones, dos corresponden a la morfología de la muestra y la restante a su composición. Cada hipercubo, está formado de imágenes y las imágenes de piexeles. Cada pixel contiene datos, estos datos son espectros que permiten identificar cuerpos de alta (metales) y baja densidad (restos orgánicos o insectos).
Lo más destacado de esta tecnología, es la posibilidad de identificar la composición de los productos en continuo y conocer el mapa de composición para saber la distribución de los componentes del producto, asegurando su homogeneidad. Mediante una leyenda de colores se puede conocer la composición del elemento detectado. A continuación, os dejamos unos ejemplos de cómo se verían las imágenes hiperespectrales comparadas con la original.